Ya estamos donde ellos quieren, el bipartidismo nos invade y contamina. Que si Rajoy, que si Zapatero, si el PP o el PSOE, si la culpa es de uno o del otro. Por un lado, los Camps, Fabras y otros, -la cúpula del PP-, con serios indicios de haberse aprovechado de su poder político. Por otro, un Zapatero que al llegar al poder, dijo algo parecido a “no cambiaré, ni os fallaré”, y ahora resulta que carga las consecuencias de la crisis sobre los inocentes: pensionistas, dependientes, empleados públicos, y los ciudadanos de a pié.
La derecha lo tiene muy claro, en Madrid, en Valencia, y en Benicàssim, aunque recurra en una patente irresponsabilidad, demagogia e hipocresía, su estrategia es evidente: “aprovechar la crisis para recuperar el poder”. Mientras el partido denominado obrero y socialista, desorientado contradiciendo su propio discurso, y con un fuerte desgaste de apoyo social. Y en esta situación, los diferentes medios de comunicación, prensa, radios, teles..; dependiendo si son de uno o del otro, se encargan de influir en los ciudadanos/as a favor del bipartidismo. Al mismo tiempo que los sectores más desemparados de la sociedad: desempleados, pensionistas, trabajadores, empleados públicos, se enzarzan entre ellos. “El divide y vencerás” sigue en plena vigencia, lo cual por cierto le va muy bien al sistema sustentado por los dos grandes partidos. Otras opciones políticas, como la nuestra, son tachadas a priorí de retrogradas, cuando lo curioso es que nunca hemos ostentado responsabilidades determinantes en la política estatal, autonómica, y provincial. En el espacio local si, y miren por donde que EU cuando ha compartido gobiernos municipales, habitualmente es cuando se han producido cambios de verdad, aunque en la mayoría de casos ha sido el grupo mayoritario del gobierno el que se suele poner las medallas, salir en las fotos, liderar la propuesta, o protagonizar la noticia.
Nosotros/as humildemente creemos que la política de verdad se debe hacer de abajo-arriba, de lo concreto a lo general, el poder debe de emanar de los ciudadanos/as. Y en este sentido la política local es una buena herramienta. Los concejales/as y el alcalde hemos sido elegidos para trabajar por nuestro municipio, no podemos permitir priorizar otros intereses, nuestra dedicación y debates tienen que centrarse en Benicàssim. La derecha local PP-ARB ya sabemos que utilizará todo los necesario para recuperar el poder en el ayuntamiento. Los de los coches oficiales, las promesas incumplidas, los PAIs salvadores, los asesores, el enchufismo, el boato, la prepotencia, los gurtel y el rencor. No deben gobernar, y ello sólo es posible evitando el bipartidismo en Benicàssim, frente a la derecha sólo cabe una izquierda responsable pero de verdad.
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